I.
¿Qué entendemos por unidad de las
iglesias?
Entender la iglesia católica como una de las que hay,
ayudando a unificar y construir puentes de unión con las demás confesiones. La humanidad
tan vacía de sentido necesita ahora más que nunca el mensaje de la Buena Nueva,
por lo tanto, las iglesias no le pueden ofrecer un Cristo roto sino unido por
el amor y la misión de la persona del Hijo de Dios.
II.
¿En qué consiste el ecumenismo?
En buscar la unidad en la diversidad de la Iglesia extendida
por todo el mundo, sabiendo que nos diferencian barreras culturales y políticas
pero eso no nos puede llevar a la división de confesiones que ahora mismo
vivimos.
III.
¿Qué valor debe darle el nuevo
pontífice a la tarea ecuménica?
Enorme, pues es necesario para el bien de las iglesias
locales y continentales. No podemos caer en un centralismo sino que tenemos la misión
de prestar atención a las diferencias que caracteriza a cada iglesia con el fin
de hallar la unidad que tanto ansía la Iglesia y el mundo.
IV.
¿Cuáles deben ser las claves del
pontificado del Papa Francisco?
-
Ofrecer
al mundo la alternativa espiritual que la Iglesia tiene: Jesucristo. Una alternativa
que de sentido vital a un mundo que se ha olvidado a Dios. En una dinámica de
diálogo.
-
Lograr
la unidad dentro de la diversidad a las iglesias locales.
-
Transparencia
en el gobierno de la Iglesia.
-
Reinventar
el papado con la ayuda de las demás iglesias para que el diálogo hacia la
unidad progrese.
-
El
papel de la mujer en la iglesia.
V.
¿Cómo entiende su papel en la
búsqueda de la unidad de las iglesias?
El papa Francisco, a lo largo de su relativamente corto
pontificado ha tenido gestos preciosos con los hermanos separados. Ha buscado
la unidad en la persecución, en el martirio, diciendo que cuando matan a un
cristiano, no le preguntan de qué confesión es[1]. También,
durante la misa con los hermanos armenios (12 de abril del 2015), se unió a la
denuncia del genocidio vivido a principios del siglo pasado. Por último, en su
viaje a Turquía le pidió al patriarca Bertolomé la bendición para él y para la
Iglesia de Roma, ofreciendo así un papado entre iguales, eliminando toda
jerarquía vertical posible, donde el papa de Roma estaría por encima.
Desde mi punto de vista, el papa está caminando por la senda
del ecumenismo desde la categoría de la colegialidad, esencial para que el
deseo de la unidad sea una realidad palpable.
[1] Es lo que él llama “ecumenismo
de sangre”. Ver comunicado con ocasión de la jornada por la unidad de los
cristianos el 27 de mayo del 2015 https://www.youtube.com/watch?v=rNjEkOd9Xic.
Me encanta que añadas nuevos recusos, pero debes tener cuidado con determinadas afirmaciones. Por ejemplo, la iglesia católica no es una más (eso significaría llegar a un relativismo eclesiológico). Otro dato es que la barreras también son teológicas como ya veremos. De todos modos creo que es un buen trabajo. Saludos.
ResponderEliminarDe acuerdo, lo tomaré en cuenta. Muchas gracias por la inmediatez.
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